Termine dudando de los reflejos de la vida,
sus grandes parajes de miedo,
y su anchura interminable.
Su pecho de flor fue la causa
por la cual ame a diestra y siniestra ,
resucite mil veces en su regazo,
pero nunca sus brazos llenaron mis ojos,
absortos y abstraídos.
volaré entre las casas,
me despertaré ya mañana,
no seré igual que hoy,
porque mi corazón no ocupara su morada...
hoy llueve, es porque quizás es invierno, y los inviernos son así.