Cuanto madura un hombre de un salto y ya está cruzando,
primero dime porque ya mañana me dices cuando,
blancura de pétalos en los labios,
como herradura tus brazos angostos y furiosos,
son dueños de mi carne pero el espíritu vuela lejos,
fuera de este mundo y del universo el canto.

quizás sea corto, nose ando con ganas simplemente de reposar en un día soleado, son mañas de un hombre, quizás de un niño, quien sabe.
Días interminables en imágenes pero tan pobres en sensaciones, nos queda simplemente seguir avanzando para no ahogarnos con el pasado y seguir creyendo.